Capitulo XXX, dizzy miss lizzy

- Las explicaciones te las debe todas juntas (tn), ¿Vamos a buscarla de una vez?- Dijo Greta, ya de buen humor al ver a su novio en una posición tan tonta-

Y luego el cuarteto se largo a caminar. Llegados todos al demon tail, Rupert los miro con una expresión de superación.

- Borracha (tn), tenían que caer Alma y Greta. Paul, George, nada de sorpresa. Son todos tan obvios-

- Rupert, Rupert, Rupert- Dijo Alma divagando- ¿Donde se fueron?, rápido, podrían estar muriendo o algo-

- No se, solo les dije que se fueran antes de que los pisara un auto- su rostro se torno pensativo- No creo que hallan llegado mas lejos que el departamento de John-

Paul y George salieron inmediatamente a la entrada, arrastrando a sus novias.

- Gracias Rupert, te amamos- Dijo James mientras todos se alejaban-

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Te levantaste de golpe, con un tremendo resacon, miraste por la ventana y seguía siendo de día, lo cual te sorprendió, empujaste tres veces a John y tomaste un trago de vodka de vainilla.

John te miro, se sentó con los ojos cerrados y te extendió la mano, reclamando su botella.

- ¿Todavia es de dia?, woa- dijo mientras parpadeaba una, dos y tres veces seguidas-

- Estaba... pensando lo mismo- dijiste pensativa-

- ¿Que carajo de hora es?- Te dijo tendiéndose nuevamente en el piso-

- No se, ¿donde hay un puto reloj?-

Cuando intentaste pararte para buscar un reloj, te tropezaste con tu propia voluntad y perdiste el sentido del equilibrio. Y por eso caíste en seco sobre John, cara contra cara. Lo miraste profundamente a los ojos.

- ¿ Sabes que Winston?- Dijiste por lo bajo, pero igualmente te escucho-

- ¿Que?- dijo el por lo bajo también-

- No se porque te dejo Cynthia- Te sentías culpable, se lo habías mencionado, la borrachera te impedía medir tus propias y únicas palabras-

- Te amo- Fue lo único que el dijo-

- ¿Que?- Dijiste a tono de sorpresa-

- Te amo (tn), te amo, no se desde cuando, ni como, pero el día que te dije, 'darling donde estabas?', no lo decía en chiste. Y me parecía patético de mi mismo no decírtelo, pero estas con Ringo y yo estoy borracho y..., perdón-

- Lennon- Dijiste con picardia-

- No quiero burlas, por lo menos, hasta que se me valla la borrachera-

- Dios Lennon, besame- Fue lo único que pudiste decir-

No sabias si era la excitación por el alcohol o que, pero era el beso que mas habías deseado en tu vida, mas que a Ringo, mas que a Mick y mas que cualquier cosa en el mundo.

Lo único que el pudo hacer fue mirarte sorprendido analizando la situación. Después de todo tenias que ser vos la de la iniciativa, a pesar de que sus rostros no estaban a mas de tres centímetros el camino hasta sus labios se torno eterno, pero valió la pena; el cálido movimiento entre los labios de ambos era mas que un simple beso, era la sensación de estar en casa, en tu cama tapado, una tarde de invierno después de un día de lluvia fría afuera. Y la excitación de frotar tus pies contra el colchón para tomar ambiente dentro de las sabanas, era comparable con el movimiento de sus salvajes lenguas.

Todo era completamente perfecto, hasta que Paul abrió la puerta.